En particular, la conexión del aneurisma a las estructuras vecinas se puede visualizar bien en la angiografía TC, que es útil para planificar el enfoque adecuado para un procedimiento quirúrgico. Debido a las estructuras óseas circundantes, hay por desgracia puede haber un montón de artefactos que corrompen la imagen. La cantidad de agente de contraste utilizado en la angiografía TC es inferior al de la angiografía convencional. Esto puede conducir a la falta de representación de los pequeños, pero potencialmente funcionales vasos importantes de la imagen. Es esencial para ver si ese es el caso, antes de iniciar el tratamiento. Debido a los artefactos también puede verse como el calibre de las arterias varía, que pueden ser mal diagnosticados como vasoespasmo. A pesar de muchas opiniones contrarias, creo que la angiografía por substracción digital (DSA) sigue siendo indispensable.
Se reconoce aquí un aneurisma típico de aproximadamente 7 mm de tamaño. Además de la edad, la condición y deseos del paciente, la situación, el tamaño y la forma del aneurisma son factores cruciales que influyen en las opciones de tratamiento.
Esencialmente hay tres posibilidades:
1. El tratamiento quirúrgico después de una craneotomía y clipaje del aneurisma,
2. La embolización (espiral) por espirales de platino (bobinas GDC) a través de una técnica de catéter percutáneo endoluminal
3. Sin tratamiento, pero con la observación de seguimiento.
Cabe señalar, sin embargo, que la observación sin tratamiento es peligroso debido al riesgo de sufrir una hemorragia subaracnoidea debido a la ruptura del aneurisma. En general, los aneurismas intracraneales, dependiendo de los factores de pronóstico (como la historia anterior de la HSA, la edad y condición del paciente, los riesgos del tratamiento) debe ser siempre son tratados, debido a que el riesgo de una ruptura es tan alta y una ruptura es a menudo fatal o asociado con déficits neurológicos graves.
El aneurisma fue tratado con éxito mediante embolización percutánea.
Otro ejemplo: Aneurisma gigante de la arteria cerebral media derecha, que inicialmente cerrado por embolización, pero más tarde, debido al aumento de tamaño y la reperfusión, tuvo que ser cortado y resecado (ver aquí)